A partir del 1 de enero de 2019, la Unión Europea (UE) establecerá unos nuevos requisitos de emociones de CO2 para los camiones.
Los nuevos caminos pesados fabricados dentro de la UE deberán ir acompañados de una declaración que muestre el consumo de combustible y de las emisiones de CO2.
De este modo, la UE pretende fomentar que los compradores de camiones apuesten por vehículos eficientes desde el punto de vista energético con un menor impacto climático, lo que reduce las emisiones generadas por el tráfico de camiones.
Según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) de la ONU, el tráfico pesado representa alrededor del 6% las emisiones globales de gases de efecto invernadero, y el sector depende en gran medida de los combustibles fósiles.
Actualmente no hay decisiones sobre impuestos o incentivos asociados con los nuevos requisitos de declaración. La UE prevé que las emisiones de CO2 del tráfico de camiones disminuirán en un promedio del 1,5% anual hasta 2030.
